Un clásico atemporal protagonizado por Fumi Kaneko y Federico Bonelli, que captura toda la magia y el virtuosismo del ballet.

La bella durmiente ocupa un lugar especial en el repertorio del Royal Ballet. Fue el ballet con el que la compañía reabrió la Royal Opera House en 1946, tras la Segunda Guerra Mundial, su primera producción en su nueva sede de Covent Garden. Margot Fonteyn bailó el papel de la bella princesa Aurora en la primera representación, con Robert Helpmann como príncipe Florimund. Sesenta años más tarde, en 2006, la puesta en escena original de 1946 fue recuperada por la entonces directora del Royal Ballet, Monica Mason y Christopher Newton, devolviendo al escenario los maravillosos diseños y el brillante vestuario de Oliver Messel.

La magistral coreografía del siglo XIX de Marius Petipa se combina con secciones creadas para el Royal Ballet por Frederick Ashton, Anthony Dowell y Christopher Wheeldon. Juntos crean una encantadora secuencia de joyas del repertorio de ballet, desde el icónico "Adagio de la Rosa", cuando Aurora conoce a sus cuatro pretendientes reales, y el cadencioso "Vals de la Guirnalda", hasta el pas de deux de la "Visión", cuando Florimund ve a Aurora por primera vez, y los divertimentos de celebración y el pas de deux final que llevan el ballet a su glorioso cierre. En todo momento, la magistral partitura de Piotr I. Chaikovski lleva la música de ballet a una altura de pasión, sofisticación e intensidad que posiblemente nunca haya sido superada.

Con la colaboración de Naxos